Numb.er siempre han sacado a la luz su eterna devoción por el post-punk, al cual embriagan en 'Price' de un garage extraviado cuyas luces estroboscópicas cordales lo llevan de gira por los 70's más oscuros, penetrando en su camino un miedo infundado por la superposición de una niebla que intenta rozar el shoegaze para hacerse con el control, difuminando los vocales su espesor hasta el punto de quedarse la guitarra y el bajo completamente desnudos, no dudando en reverberarse para decir la última palabra, esa cuyo sonido ya fue escrito en su álbum debut "Goodbye", atendiendo al nombre de 'We Hide (Redux)' y reinventándose de tal modo que la parte sintética se ve acordonada por la batería y las cuerdas, dejando el metrónomo sus constantes vitales fuera de juego en post de un paisaje desolador que se ve llevado al límite gracias a una tenebrosidad por antonomasia que recluta el sentimiento que debe imperar una noche como la de los muertos vivientes.