El proyecto (casi) en solitario de Arden Guff, Busted Head Racket, debuta en largo con el álbum "Go Go Go!"para Erste Theke Tonträger (vinilo) e Idiotape Records (cassette), un chorro de egg-punk australiano de tonalidades garageras en las que el punk se muestra en esos vocales reverberados y sobrecargados, haciendo que el público desfase en un moshpit de barbaries danzatorias en el que los cuellos rotos dejan atrás el headbanging, una utopía enfrascada en un lo-fi de manual que lógicamente pasa por encima de las calidades sonoras de los temas que componen el álbum, valiéndose del synth-punk para seguir al pie del cañón, todo partiendo de la base del uso exclusivo de un bajo hinchadísimo de pedales algarábicos por los que surfear, llegando sus olas sonoras en breve a Europa, en un tour en el que Marci Ailello se hará cargo de las teclas y Riley Gardiner de las baquetas.