El debut en largo de DITZ para Republic Of Music, "Never Exhale", es un monumento a la oscuridad, los recovecos incendiarios y la industrialidad, llevada esta última a su máxima expresión, codeándose con coetáneos irlandeses de su talla, antes de implementar punk vocal, fuzz travieso en las formas, post-punk adoleciente de sus originales 70's y el toque perfecto de distorsión en búsqueda de problemas instrumentales y vocales, llegando de esta manera un post-hardcore que se relame en el mosh pit originado, así como el ruido ensordecedor al que dan lugar con ello, obra maestra de Cal Francis (voz), Anton Mocock (guitarra), Jack Looker (guitarra), Caleb Remnant (bajo) y Sam Evans (batería), quienes reciben la llamada del desorden público para poner armonía en su vida, en píldoras que llegarán al éxtasis cuando sean tocadas y alargadas en el tiempo en directo, con dobles salidas de tono que les llevan a un bucle de maldad sonora extrovertido y empatizan con quien tienen en frente, asegurándose una gloria bailada y headbangeada en comunidad, deformada a su antojo y semejanza, a riesgo y cuenta de quien maneja la situación caprichosamente, de ahí que sumen la locura a sus cualidades, llegando a ella antes de que el sentido cambie en dirección contraria, manteniendo a raya el fin del mundo alternativo alucinógeno del que han escapado, haciendo bueno lo litúrgico y lo depresivamente mental, en medio de un sacrificio tribal al final del LP.
★★★★★