Desde Gotemburgo y para el sello sueco PNKSLM Recordings, Åsa Söderqvist se presenta con su single debut 'Oh Please Be A Cocky Cool Kid', en el que sus vocales filtrados de texto irónico, se entremezclan con la electrónica que suele acompañar las canciones de Grimes pero salida de un túnel futurístico.
Åsa ya hizo sus primeros pinitos el año pasado, utilizando su propio nombre, con dos snippets englobados bajo el de su actual proyecto, en donde juguetea con su voz filtrada y, guitarra en uno y batería en el otro, que ya hacían ver las maneras de la joven de 23 años, oscuridad filtrada y envuelta en capas de efectos a los que pone voz de niña buena y recatada que, de cara a la galería, tiene las lecciones de educación bien aprendidas, pero que, de puertas para dentro, éstas la importan una mierda, infringiendo todas y cada una de ellas para hacer honor a u primera banda de punk feminista.
Su segundo single, '666', realmente llama al diablo del noise gracias a los riffs de su guitarras y sus vocales totalmente poseído por éste, en plan adolescente pasando de sus padres y sin control ninguno, con una batería que tiende su mano hacia el pop y la calma, pero no se deja engañar por mucho que siga insistiendo.
Su segundo single, '666', realmente llama al diablo del noise gracias a los riffs de su guitarras y sus vocales totalmente poseído por éste, en plan adolescente pasando de sus padres y sin control ninguno, con una batería que tiende su mano hacia el pop y la calma, pero no se deja engañar por mucho que siga insistiendo.