Están los avanzados a su época y luego
Why Patterns, cuyo LP debut,
"Regurgitorium", via
Human Worth, explicita con el título la barbarie experimental que nos espera, discurriendo en
'Parapraxis' un noise de rabia acumulada que se disputa en vaivenes esporádicos, los cuales responden solo a la agudeza visual de quien lo ha visto venir, calentamiento para
'Bachelor Machine', cuya descarga de adrenalina discurre entre riffs stonerianos, pasión vocal por echarse por encima el sayo del terror, distorsión elaborada a conciencia y una metamorfosis curativa de espacialidad volcánica en la que el último agujero negro engulle al cantante,
'Effective Affinities' con las que es fácil concurrir en un momento en el que
Kim Gordon provoca que, la alteración de las hormonas se vea tensionada por una batería recelosa a la que sus compañeros instrumentales insuflen post-rock metalista, produciéndose la explosión esperada en
'Bone Apple Teeth', aletargando un cubanismo urbano cuyos pilares se sostienen por el llamamiento lúdico-festivo a su dios, bailándole alrededor de un fuego cuya gasolina es la reverberación, su propia demonizacion y la locura impregnada del ruido que desarrollan, paralelismo cultural con el submundo de
'Wretched Makeshifts', orquestado desde el pedestal microfonal, como preparación de ese ataque hardcore para quien ose invadirles.
'Silentium' es mecanografiada desde un speech solitario, en el que los delirios y gritos conviven con su alarma personal como si todavía el fin del mundo no hubiera ocurrido, espiritualidad que 'Weal' se encarga de resquebrajar en medio de ese fango de miedo e inanición oscultativas, cuya metamorfosis final no puede provenir en ningún caso del ser humano, sino del recorrido metalero de 'Railway Spine', postulándose como una ensoñación volcánica de una represión que con ellos no es palpable, resaltando un drum'n'bass con el que se confirma que le dan a todo, resarciéndose 'Unstimmung' con esa catarsis neandertal que resuelve sus problemas de la misma manera que ve la vida, movimiento Rumpelskiniano que acaba por desfigurar al personal cuando llevan el empoderamiento jazzístico al límite, siendo 'Quotidian' la que cotiza al alza en el mundo novenetero de Dave Grohl, algo que recalca ese speech vacunado en mil batallas y que le permite a 'Vomitorium' pasar desapercibido a base de retazos psicóticos adornados por las vanidades de sus miembros, ida de olla que pone de manifiesto en su punto álgido a Los Saicos entre risas metódicas disonantes y el lado oscuro del propio Joker, tenebrosidad que finalmente peca de optimista cuando cae en desgracia.
