Scott, Sam, George, Harry y Ed juegan en una liga marcada por la intensidad del garage y el noise de vocales post-punk que practican, estos últimos jugando con la casi imposibilidad de poder distinguirlos de los de Eagulls.
Los de Brighton llevan agitando la escena local desde hace un año, cuando la oscuridad de 'Realise' traspasaba las fronteras de lo binaural para alojarse en el cerebro como materia oscura, a pesar de que el principio auguraba algo de ese dream mezclado con new wave con el que DIIV nos deleita en cada canción.
El sello Beech Coma se fijo en ellos e incorporó 'Blinded' al volumen 2 de su compilación, donde siguieron con su particular puesta en escena al micrófono, variando las capas de su melodía de forma que ahora el garage noise flota en el ambiente sin descanso, con momentos en los que la furia sale por la boca, enganchándose con 'Awake' por la envidia de esta última de querer aparecer en la foto de familia con la que suele deleitarnos Art Is Hard Records, dando éstos una versión del vacile más propio de una batalla de gallos un sábado noche, donde impera el salir vencedor, como aquí ocurre a tenor del grito final de machote.