Slaves - Take Control

Laurie Vincent e Isaac Holman vuelven con "Take Control", su segundo álbum tras haber debutado el año pasado con "Are You Satisfied?". El dúo de Kent lo vuelve a tener claro, y el que pudiera esperar un bajón del dúo, aquí lo tiene de culo para encontrarlo, ya que para añadir más leña al fuego, han contado para dos de los temas con el rap de Michael 'Mike D' Diamond (Beastie Boys) y Baxter Dury.

'Spit It Out' saca el hacha de guerra tras unos riffs que ya avisaban de ella, con la tensión concentrada en los vocales de Isaac, los cuales descargan toda su furia cuando la maquinaria de guitarra y batería se pone en marcha, profesando un terror que supone la segunda parte de 'The Hunter', con la presa aquí ya capturada, sintiendo ésta el pánico en su ser gracias a los dos Mr. Hyde que tiene encima, obligándole 'Hypnotised' a correr, correr y seguir corriendo, para alejarse del punk abrasivo que los dos van facturando gracias a que el cable se les ha acabado de cruzar del todo, poniendo algo de orden Mike D, con unas rimas fracturadas por el desorden de estos dos en 'Consume Or Be Consumed', con una lírica donde la droga no es lo que aquí les concierne, sino algo más primitivo, el azúcar, de ahí el teclado a lo familia Adams, y el cabreo que éste parece infundirles de nuevo, apoderándose lo macabro de ellos, con una motosierra haciendo que la captura se esfume entre gritos de dolor.

La celebración viene a cargo del tema que da nombre al álbum, acordándose éste del primero de ellos, con ese ritmo básico de batería que se unió a los riffs garageros y al punk vocal para hacer del mismo todo un triunfo, segundo en su cuenta, comunicándolo a través de la línea teléfonica que es 'Mr Industry (Skit)'.

Isaac se presenta como un presentador maquiavélico en donde ensalza la figura de un 'Rich Man', carne de cañón que no representa ningún valor para él, invitando a que el resto lo odien tanto o más que él, cambiando hasta la lírica del título para hacer poner bitch donde antes ponía rich, juego psicológico que en 'Play Dead' le pasa factura al generarse entre sí mismo y su subconsciente una controversia mental que se refugia en el stoner cuando la paranoia deja de ser el juego de niños que parecía al principio.

Tiempo muerto para desconectar a través de 'Lies', donde Isaac se conmuta con Kele Okereke (Bloc Party) para ejercer de boxeador y dar así el mejor golpe posible a su situación, saliendo de ella con un gancho de derechas que lo deja noqueado a sí mismo, bajando así al subsuelo de mierda con su voz rota, con el único objetivo de volver a elevarse a los infiernos, con la ayuda en todo momento de Laurie, acompañándole con unos riffs que si tuvieran continuidad en el tiempo harían hasta las delicias del propio Jimi Hendrix.

'Fuck The Hi-Hat' muestra a Isaac resurgiendo de sus cenizas, rebobinando 'Gary (Skit)' hasta el momento exacto en el que se produjo la desconexión, buscando 'People That You Meet' las causas de ello, experimentando con las almas de sus conocidos sectarios a través de la brujería que caracteriza a Fat White Family, ayudándose del post-punk de 'Steer Clear', con Isaac y Baxter Dury como trovadores para hallar unas respuestas que todavía no están del todo claras, a pesar de juntar 'Cold Hard Floor' todos sus esfuerzos en una línea de bajo que comulga con una jauría animal que va despertando de nuevo sus instintos primarios.

'STD's / PHD's' se llena de industrialidad para aclarar que uno es lo que es por esta misma razón, no por los logros académicos, así que a la mierda todo, exponiendo a 'Angelica' como arpía que llega a lo más alto pisando al resto, y 'Same Again' recordando que esto es el pan de cada día, abarcando aquí su legión de palabras contra los precios, la situación precaria del trabajo y literalmente, los tontos que establecen las normas.