Hay gente que como yo, se queda con el "808s & Heartbreak" de Kanye West, conduciéndonos dicha cifra a las cajas de ritmo de la marca Roland, las cuales parecen estar mínimamente detrás del artista que se esconde detrás de este alias, Skube Burnell & amigos, cuyo dream-pop viaja por las constantes vitales del rapero, pero con el estilo indudable de quien se llama Mac DeMarco, con la compañía de la que se rodea llevándolo por momentos a un retiro de golpeos a uno mismo que obedecen a parámetros de profunda distopía mental, que se intensifican en 'House Of Love', desintonizando las cuerdas con respecto de los vocales, concretamente una cabeza por detrás de estos, lo que parece llenar de dudas al de Melbourne, las cuales se acentúan hasta caer en el susurro.
'Nice 'N' Easy' juega con el sonido del canadiense, reverberando hasta el teclado-que-hace-las-veces-de-piano que aquí introducen y que parecen haberlo sacado de cualquier cabaret barato, corriendo el alcohol como rayos de sol psicodélicos que provocan movimientos pesados que les obligan a concentrarse en un punto de batería que los lleve de nuevo a razonar a través de los sueños y no dejar que estos se pierdan por los líos de faldas del principio.