Ugly siguen a lo suyo, sorprendiendo con otro par de singles que nuevamente se desmarcan de lo establecido, dejando por ello casi de lado la buena nueva de que suman dos nuevas caras al proyecto, notándose que son un sexteto desde los primeros compases de 'Blister' debido al aumento de cuerdas, y al mismo tiempo, por el saxofón dominador de serpientes, sumándose ambos a ese paisaje sonoro bañado en dream-pop, riffs y rock, que se reparten los elogios, de los que la voz del frontman Sam se sobrepone con ese deje a King Krule, logrando convertir en oro todo lo que toca, confrontando con su lírica la fiesta que se monta a sus espaldas, con el toque de queda en modo cenicienta para que la atención se centre en 'Rats Race, Snail's Pace', que cambia los animales de su crítica por ratas y caracoles, contraposición total a la velocidad interpuesta, que aumenta una marcha más para endulzar la jam jazz session perfectamente orquestada por Trudy And The Romance , con el objetivo claro de que acabe en una balada en la que el micrófono deja constancia de la familia que son en la actualidad.
📷 Chloe Dunscombe