La brutal instantaneidad de RIFLE es vertida en su carta de presentación, "Holloway Demos", donde las puñaladas de punk vocal se suceden gracias a Max, quien delega el garage y el hardcore suavizado de la instrumentación a los guitarristas Cam y Josh, el bajista Ross y el batería Flynn, politizando 'No Pasaran' su mensaje en un rara avis de velocidad que se va por la puerta de entrada de 'The Flag', ondeada como moderadora de lengua viperina que recrea su propia batalla junto con un noise grandilocuente, hasta que su color blanco pretende que 'Feet First' se apiade de una paz que ni está, ni le espera, tanto en su mensaje como en sus formas, de ahí que reciba una patada en sus partes más pogoteistas cada vez que el quinteto carga con todo, bofetada de realidad para 'United State', la cual se provee de la misma locura que Amyl And The Sniffers proyectan en sus directos, desarrollando a su vez un militarismo bailable que les hace mantenerse en pie y dejarse de debilidades.