De esto que vas a una tienda de discos y te acabas comprando el debut en largo del trío de Olympia sin haber escuchado nada de ellos, solamente por la indicación tuya al gerente de la tienda al ver que ya tienen la reedición del "Nevermind" de Nirvana y de el disco está editado por Sub Pop Records.
Mi admiración por la banda de Aberdeen no es única, ya que tanto la guitarra y los vocales de Steven, el bajo de Sean, así como la batería de Allen dan buena fe de que ellos tienen en un pedestal a Kurt Cobain y los suyos, como bien demuestra 'Pronoia' desde que arranca, mostrando una mezcla de rock sucio y grunge de vocales calmados como los de Joe para Big Ups, con explosión incontrolada cuando se cansan de mostrar su cara de niños buenos.
Desde Seattle nos vamos a Leeds para encontrarnos a Eagulls en 'Starved For', poniendo una pared de noise de fondo que hace que sus instrumentos se vuelvan ácidos e incendiarios con los retales psicodélicos que escapan de ellos y de los cuales no hay ni rastro en 'Autothysis', prodcuto de la escucha compulsiva de "In Utero", en donde del desgarro vocal de Kurt tampoco hay rastro, en detrimento de un texto que como en 'Don't Have To', sí lo refleja fielmente.
Con 'Egophillia' vuelve la velocidad creativa con un desmadre rabioso de vocales The Offspring que en 'Oneirophobe' llega a rozar su nirvana, lo que conlleva sacar su parte más salvaje, y es que jugar a ser Kurt Cobain tiene estas consecuencias.
'Disdain' enamora con esa distorsión que desconcierta hasta el esmalte dental a la vez que, quitando el primer corte del álbum y que 'Lost And Found' es un calco de 'Smells Like Teen Spirit', es lo más cerca que han estado del conjunto que supone "Nevermind", cuya etiqueta se quitan de un plumazo al creerse Allen el batería de Slaves, Isaac, y que en 'Pareidolia', este último, también parece llevar los vocales convirtiendo a Steven en un trovador punk bipolar, a lo que 'Terrible' ayuda con sus constantes vacilaciones, que ellos parecen traducir en seguridad personal.
'Outercourse' se mantiene en un ola de grunge que combinan con una parte más prolífera para los skaters, hasta el grato final, el cual guarda una jam desestructurada solo apta para personas que deseen un tratamiento mental especial.