Gong Gong Gong tienen las ideas muy claras, quedando demostrado en "Phantom Rhythm", su álbum debut, via Wharf Cat Records, donde el dúo formado por Tom (voz y guitarra) y Joshua (bajo), exprimen su instrumentación para sacarle al blues y al rock, el máximo en 'The Last Note', cabalgando por ella como dos jinetes del apocalipsis mientras parecen mantenerse ajenos a los rebuznos de una psicodelia, que se adentra en su ser a medida que la lírica insiste en descubrir caminos nuevos a los ya vividos, dejando unas 'Notes Underground' con las que dicen adiós a su anterior vida, y hola en 'Ride Your Horse', aunque esta última es el reflejo de una planificación exhaustiva de lo que quieren que venga a continuación, dándose algo de caña a si mismos para no repetir errores, algo en lo que también anda 'Moonshadows', que se agita al llegar una rabia que se sabía que antes o después se iba a dar, escenificada con un stoner y una reverberación vocal, que sin embargo, no olvida lo sufrido anteriormente, necesitando de 'Inner Reaches' para terminar de salir a flote.
'Gong Gong Gong Blues' da lo que promete, además de meterse en una vorágine de riffs a cuatro manos que carga su intensidad, metiendo el bajo en el cuerpo para mortificar una superación meteórica, que tiene su deceleración en 'Wei Wei Wei' debido a que la razón todavía colea en el ambiente, y aunque son hombres hechos y derechos, no tienen intención de tropezar de nuevo en la misma piedra, aunque 'Some Kind Of Demon's vuelven a manifestarse y las cosas empiezan a dejar de estar tan claras, abriendo 'Night's Colour (Chongqing)' un camino oscuro de derrotismo que enmudece en pos de una meditación cuya respiración asistida se produce en 'Sound Of Love' , la cual da los pasos necesarios para rehacer su vida, haciendo caso solemne a lo que dicta el corazón, entregando este a cambio una serie de riffs que fluyen junto a una polución de noise, derivando en un discurso instrumental que incluye fuzz en su factura.