Oi Boys - Oi Boys

La sensación francesa del post-punk, Oi Boys, debuta en largo con un álbum homónimo publicado por Hidden Bay Records, dándonos el dúo oficial (cuarteto en directo), una lección de veteranía hecha juventud, por aquello de rememorarse unas cuantas décadas atrás y transmitir esos sentimientos clásicos, creciéndose 'La Liste' con un coldwave en el que los riffs reverberados, atemporalizan una manifestación sintética que se rompe junto con el mensaje embebido al micrófono, pecando con un punk acelerado al que 'Déjà Reine' no deja participar de sobremanera, de ahí que la ambientación sea lúgubre, pero no hasta el punto del vacío emocional del que se responsabiliza 'Tes Mortes Idoles', liberándose por ello de esa carga mortal que pasivamente, se muestra acordonada por una instrumentación que echa fuego por la boca, desprestigiendo la desolación volcánica en la que se puedan esconder de aquí en adelante, llegando el arrepentimiento 'Sur La Place', centrándose en un punk satánico capaz hasta de cambiar su historia.

La razonable alegría que uno pueda mostrar, vive de forma alocada en 'Mon Dernier Dieu', asomando, entre lava cordal, una tentación de declarar su amor incondional a Eagulls, pero la marcación acérrima de sus tempos, desiste rápidamente de esta idea, así que 'Dernière Tournée' enfila un camino de espinas donde el contorno de la figura de Joy Division, se dibuja inclusivamente en una carrera a '200km/h' sobre 'Les Réverbères', aunando una morfología que asesta un golpe glaciar en la que el ritmo baja a la solemnidad del que ha perdido a un 'Jack Palance' en guardia y prefiere no revivir de sus cenizas ni siquiera al tercer día, plegaria que suena más a que 'Le Film Est Mauvais', anticipándose así a los anticiclones de idas y venidas que, melancólicamente, anuncian orgánicamente el 'Mourir Accompagné De Rien'.