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El LP debut de The Devils para Go Down Records, "Let The World Burn Down", muestra al dúo de Nápoles en un inicio más sosegado que en anteriores entregas, pero también más trabajado, ya que en 'Divine Is The Illusion', el rock se muestra más espaciado para que Erika Toraldo (voz, batería) se cobije en el micrófono y no en las baquetas... hasta que Gianni Vessella (voz, guitarras) dice basta y ambos empiezan a generar un estilismo alternativo que vuelve a traernos los buenos viejos tiempos, alucinando 'Killer' Kiss' con The Black Keys, cargando las cuerdas sobre sus hombros con el peso de la saturación sonora, hipnotizante y desenturbiada por la limpieza de los riffs cuando no tienen necesidad de crear un incendio, que para eso está 'Mr Hot Stuff', relamiéndose con las antiguas cabalgadas instrumentales entre punk y blues, dando ese golpe en la mesa necesario para que la perplejidad de algunos desconfiados se pague cara.
'Til Life Do Us Part' democratiza con la parte de la cantante empeñada en mostrar otros registros, volviendo a americanizarse para dar una clase de sutileza entre cigarros y whisky del caro, una utopía para la carrera de fondo asalvajada que es 'Roar II', afectiva a más no poder con esa parte suya que saca a su lobo interior y con 'Shake 'em', dejando ambas a su alrededor una masacre de sangre que confluye con su magia negra de rock'n'roll y garage, fluyendo como siempre ese mosh pit deseoso de más, valiéndole 'Teddy Girl Boogie' como momento esotérico de la noche que busca resarcirse de unos pecados, bien entrados en reverberaciones y en psicodelia asertiva, que ya luego al amanecer todo forma parte de ese pasado llamado 'The Last Rebel', sacando a relucir esa última bala de gasolina que a buen recaudo tenían en la recámara, sumándose a esta dicha el clásico 'Horror And Desire'.
📷 Jessica
