La vida es dura, pero más dura se pone cuando uno escucha el álbum debut de Paracetamøl, "Behave", publicado via Bottom Shelf Records y Waaghals Records, enseñando su patita garagera 'Hectic Coop', hardcoreada para casar con el punk vocal enrarecido que se produce por la carga demencial que lleva encima, calderilla branquial que se desmonta a medida que la lírica atosiga a la instrumentación, alucinándose hasta el punto de contagiar a 'Ice Cold' del espíritu de Bad Breeding, montándoselo estos por su cuenta al hacerse cargo del alma del cuarteto, cuya paranoia va purificando también a 'Beach Problem', con The Wytches como testigos oficiales del enlace, ambiente que se enrarece más por la electrificación espontánea que corroe por su alma, dejando el reblandecimiento social ya si eso para otro disco, ya que ahora toca que algo de baile en el que Iggy se contonea en la cara del algún malnacido, dándole su merecido a base de unos baquetazos que solo tienen respecto por el infierno de 'Creatures', el cual se ilumina con un catarsis de bienvenida que enseña que el fuzz forma parte de la parranda que tienen aquí organizada los de Arnhem.
'Unblased' encierra un relajamiento estrambótico que difumina por momentos la aparición al micrófono de Marilyn Manson, cuando el tema pierde el norte por culpa de ese tono de Joker planeando su siguientes pasos al salir de la penitenciaria mental, sumando idas y venidas de los espíritus de su subconsciente, lo que hace del tema algo tenebroso y plácido para 'Black Sugar', que así puede dedicarse en cuerpo y alma a los 70's, comandados por unos The Rolling Stones cuyos cuerpos blanden la espada de The Parrots, afiliación a la que se apunta el tema que da nombre al álbum, añadiendo la cortisona referencial de L I T H I C S para que el post-punk, y el aderezo de sus riffs, se vean representados en la pista de baile.
'Snow' es una vuelta a su normalidad, descargando en ella un sufrimiento despotricador que a ritmo de grunge garagero wah wah, sirve como descarga purificadora, siguiéndole la pista 'Mask Off', la cual termina de romper los cuellos del respetable con pespuntes estupefacientes y una aspereza vocal de quien todavía tiene mucho que decir, siguiendo 'Unestable' esta línea anestesista demencial de trazos psicodélicos antes de perpetrar su desconfinamiento hecho canción, 'Ouf', saliendo en tromba de su cámara hiperbólica aferrándose al destrozo de todo elemento analógico que haya participado en el álbum como forma de liberación salvaje.