JOHN vuelven a la palestra con su segundo álbum de estudio, "Out Here On The Fringes", publicado a través de su propio sello Pets Care Records, en donde los dos John (Newton, vocalista y batería, y Healy aka Johnny, guitarrista), siguen sin modificar un ápice ese discurso áspero que los ha llevado de "God Speed At The National Limit" al estrellato underground, pasando en exactamente 2 años de ser prácticamente unos desconocidos a contar con el beneplácito de referentes como IDLES, quienes incluso se los llevaron de gira el año pasado... y eso es gracias a la apología autoritaria de temas como 'Future Thinker', donde el terror vocal se ve exacerbado por esa suerte de rock garagero que escupen los altavoces, donde también hay alardes de fuzz luminoso con los que abordan un viaje que no ha hecho más que empezar, así que si encima los riffs se aprovechan de la lujuria del descontrol que planea, el noise acaba siendo parte de lo que es su seña de identidad, engalándose 'Standard Hauntings' además con lo mejor de un stoner que va imponiendo su ley con miguitas de pan puestas en el camino, para que el resto no tengamos más campo de visión que el interpuesto por los londinenses, endureciendo aún más su propuesta con el tema que da nombre al álbum, el cual ata en corto con soga la posible represión de un metal, que por momentos parece que se va a hacer con el control, aunque dejan bien claro que si algo debe dictaminar el fin del mundo, va a tener que ser sacado de su cosecha, postulándose 'Western Wilds' para ser ella una de las candidatas, azotando (más que agitando) con su sonido una coctelera de la que se desprenden Beekeepers.
La vida sigue su ritmo con 'High Digger', la cual eleva el tono frecuencial para que el avituallamiento de tácticas a la hora de defender su trono, vaya en aumento y el resto tenga que conformarse con un segundo puesto que en realidad, sabe a muy poco, paseo triunfal para una 'Dog Walker' que pone el foco en la oscuridad más absoluta y los chispazos eléctricos de las cuerdas, cuya rotura, de producirse, provocaría un agujero negro que se llevaría por delante la década de los 70's, premonición de lo que es 'Laszlo' , timón anarquista que toma como modelos a HONEY o Claw Marks, para arramplar con todo lo que se va encontrando a su paso, quedando en 'Midnight Supermarket' unas cenizas vocales que abogan por el auspiciamiento del dúo, obteniendo una respuesta afirmativa en 'Solid State', la cual revierte la situación con un volcán cuya lava se produce a cada golpe de baqueta y se extiende por cada cuerda de la guitarra, hasta que ambos, estáticamente, se ven absorbidos por esta vorágine en la que no queda títere con cabeza.
📷 Paul Grace